* Aún cuando estés solo, evita las actitudes
indignas pues tu dignidad no debe apoyarse en la opinión de los otros sino en
tu propia sabiduría.
* La dignidad es el más piadoso de los
mantos, el más resistente y el más brillante; no lo abandonéis nunca. La
dignidad es algo así como nuestra envoltura espiritual. Mantenedla a toda
costa. Un hombre sin una pierna, sin un brazo, sin un hijo, sin fortuna…, sigue
siendo un hombre. Pero sin dignidad es un
payaso que hace reír y termina molestando a todos.
* La dignidad es la inclinación natural hacia
las cosas buenas y perdurables. La dignidad propiamente dicha no es altivez ni
humildad, sino situar nuestra conciencia en el justo punto y lugar a que nos da
derecho nuestra larga trayectoria como seres humanos.
* La mejor forma de mejorar el futuro es
afianzar el presente, dignificarlo, trabajar duramente por un mundo nuevo y
mejor, sin exigir de ese mundo nuevo algo que no nos atrevemos a exigirnos a
nosotros mismos.
* No es el oficio el que dignifica al hombre,
sino este al oficio.